Dani y los Diamantes - Capitulo 1

Era una noche lluviosa del mes de abril, estaba viendo en la tele las noticias de las 21:00, vaya, no las veía por gusto, era por ver a la mujer del tiempo. En ese momento, mi madre me dijo que fuera al desván a guardar el viejo ordenador. Con toda mi rabia por no ver las noticias lo rompí; sin que se diera cuenta lo lleve al desván en 50 ó 70 trozos. Lo coloque junto a un armario, que por cierto nunca lo había visto, estuve observándolo durante unos minutos pero no averigüe de quien era, abrí el armario con toda mi tentación. Allí no había nada, bueno, algo si había: telarañas, polvo, etc. Entre las telarañas vi una fotografía vieja, fui a cogerla, para ello tuve que meterme en el armario y en ese momento no sé si fue por mi peso o por que el armario era viejo, pero el suelo del armario se rompió, me asuste mucho y salí del armario enseguida, al menos cogí la fotografía; no transcurrió mucho tiempo en darme cuenta de que en esa fotografía aparecía mi bisabuela llamada Remedios. No pude resistirme a ver lo que había bajo aquel suelo roto, sabiendo que lo que hubiera allí era de mi bisabuela Remedios. Me acerque lentamente al armario, quite el suelo roto y en su interior encontré un misterioso cofre, pero no pude abrirlo porque la cerradura era muy extraña que tenía una forma familiar para mí. Escuché pasos acercándose hacia mí, era mi hermana pequeña llamada Mónica, que por cierto era muy pesada, entrometida, vaya todo lo que normalmente se le dice a un hermano/a pequeño. Rápidamente me escondí en el armario y junto a mí al cofre. Al cabo de unos minutos mi hermana se fue y yo salí de ese infernal armario y claro conmigo también salió el cofre. Lo guarde bajo mi cama rápidamente, porque ya era la hora de almorzar. No comí casi nada porque no podía sacarme de la cabeza la cerradura de ese cofre, no sé si fue un milagro o no, pero se me vino a la cabeza la respuesta. Giré la cabeza hacia la derecha, contemplando el collar de mi madre ya podía asegurar que mi respuesta era cierta. La llave para abrir el cofre era el diamante de mi madre, pero tenía un gran problema, no savia como quitárselo…!Ha! ya sé, cuando se esté bañando se lo quitare. Tras unas horas, el diamante ya estaba en mis manos, y no tarde ni un segundo en ir a mi cuarto para abrir el cofre. En él había una nota en la que ponía “REUNE LOS 7 DIAMANTES Y EL DESEO QUE PIDAS SE CUMPLIRÁ”. Me quede impresionado al leer esa nota, y aun más cuando vi otro diamante en el cofre. Ya tenía 2 diamantes, ya no me podía echar atrás.

Así que a buscar los diamantes que me quedan por encontrar.